Una burrata.
10 tomates secos.
1/2 diente de ajo.
Un puñado de hojas de rúcula.
4 cdas de aceite de oliva.
Aceite de albahaca, c/n.
1Condimentar los tomates secos rehidratados con aceite de oliva, sal, pimienta y el ajo picado y hecho puré.
2Licuar la mitad con el aceite de oliva y 4 cdas del agua de remojo del tomate hasta lograr una salsa.
3Picar los tomates secos restantes en juliana.
4Romper la burrata, salpimentar y salsear con la preparacion de tomates secos.
5Agregar la juliana de tomates, condimentar con sal, pimienta y aceite de oliva; y finalmente espolvorear con las hojitas de rúcula fresca.