300 cc de leche.
250 g de harina leudante.
3 huevos.
230 g de espinaca congelada.
Sal.
1Para la masa, cocinar la espinaca al vapor o sobre una sartén sin líquido, tapada.
2Una vez tierna, cortar a cuchillo y reservar.
3Dentro de un bowl, poner los huevos con un poco de leche y batir.
4Agregar la harina y batir enérgicamente hasta lograr una mezcla untuosa. Esto va a permitir disolver los grumos.
5Incorporar el resto de la leche junto a la espinaca. Salpimentar y dejar descansar en heladera aproximadamente 20 minutos.
6Luego del descanso, sobre una sartén precalentada y con oliva, llevar un cucharon de la mezcla y cocinar por ambos lados. Reservar los canelones en un plato y tapados para que no se sequen.
7Para el relleno, hervir la pechuga de pollo con hueso.
8Una vez tierna, deshuesar y desmenuzar dentro de un bowl. Condimentar con oliva y salpimentar.
9Saltear el ajo picado y la cebolla cortada en juliana con oliva. Salar para que largue la acidez.
10Agregar blanco de puerro cortado en ½ ruedas.
11Apenas dorada la preparación, desglasar con vino blanco. Evaporar el alcohol.
12Agregar las pechugas desmenuzadas y el curry previamente hidratado en agua caliente.
13Mezclar bien la preparación hasta que tome color. Retirar del fuego y dejar enfriar.
14Agregar olivas verdes picadas.
15Para la salsa bechamel, en una sartén a fuego medio derretir la manteca hasta que tome color caramelo.
16Agregar la harina y cocinar un minuto.
17Agregar la leche tibia y disolver hasta que espese. Condimentar con nuez moscada, sal y pimienta. Apagar el fuego y agregar parmesano.