500 g de harina.
20 g de levadura fresca.
250 ml de agua tibia.
6 cdas soperas de aceite de oliva.
2 cdtas de sal.
Una cdta de azúcar.
2 cdas de hierbas frescas picadas.
50 g de queso rallado.
1En un recipiente, diluir la levadura fresca en la mitad del agua tibia.
2Añadir el azúcar, mezclar y dejar que repose durante algunos minutos.
3Colocar la harina, la sal y el aceite. Mezclar y añadir poco a poco el agua para conseguir una masa homogénea y sin grumos.
4Una vez obtenida la masa dividirla en 2. Aromatizar una de las mitades con las hierbas.
5Amasar para integrarla, forma una bola y dejar que repose durante una hora.
6Hacer lo mismo con la otra mitad y el queso rallado.
7Pasado el tiempo de reposo, amasar durante 30 segundos aproximadamente y formar un rollo con cada porción de masa.
8Cortar el rollo en rodajas y hacer palitos con cada una de las rodajas de 1.5 cm de grosor y 10 cm de longitud, más o menos.
9Disponer en una placa para horno, forrada con papel de manteca, cubrir con un paño húmedo y dejar que reposen durante 30 minutos más.
10Retirar el paño y hornear los palitos de pan durante 15-20 minutos en horno a 180°.