500 g de harina.
10 g de sal.
8 g de levadura seca o 25 g de levadura fresca.
25 g de azúcar.
50 g de manteca.
300 cc de leche.
1Hacer una corona con la harina, colocar la sal alrededor y, en el centro, la levadura y el azúcar.
2Sumar de a poco la leche para mezclar levadura y azúcar.
3Añadir la manteca, que debe estar a temperatura ambiente.
4De a poco, integrar la harina y seguir sumando la leche hasta unir todo y empezar a formar la masa.
5Amasar hasta formar un bollo liso.
6Tapar y dejar descansar un rato.
7Dividir el bollo en 6 y alisar cada pieza con ayuda de palote hasta dejar de un tamaño de 10 cm x 8 cm.
8Tomar cada pieza y plegar como si estuviéramos enrollando hasta formar un nuevo bollo ya con forma más alargada.
9Colocar en una placa las piezas pegadas, tapar y dejar reposar hasta que dupliquen su volumen.
10Precalentar el horno a 200°. Rociar las piezas con agua con un vaporizador.
11Hornear hasta que doren.