500 g de harina 000
20 g de levadura fresca
Una cda de miel.
350 cc de agua tibia.
30 cc de aceite de oliva.
Sal, a gusto.
1Colocar la harina adentro de un bowl y poner la levadura en el centro junto con la miel e ir agregando el agua tibia hasta integrar. Agregar la sal evitando que entre en contacto con la levadura para que no la desactive. Una vez conseguida una textura homogénea, agregar el aceite. Terminar de integrar todo y formar una masa. Llevar a la mesada y amasar durante cinco minutos hasta conseguir una textura lisa. Dividir la masa en dos partes iguales y dejar reposar dentro de bowls distintos en un lugar cálido hasta que dupliquen su tamaño.
2Llevar nuevamente a la mesada y estirar las masas en forma circular. Reservar.
3Para el pesto, dentro de un bowl o recipiente para mixear, llevar las hojas de albahaca, nueces, ajos, parmesano y una parte del aceite. Procesar y de a poco ir agregando más aceite hasta conseguir la textura deseada. Salpimentar a gusto y reservar.