2 litros de caldo de verduras.
Un k de cebolla blanca.
200 g de cebolla morada.
2 varas de blanco de puerro.
2 varas de verdeo.
Tomillo fresco.
70 g de manteca.
1/2 copa de vino blanco.
25 g de harina.
Un pan de campo.
300 g de queso gruyere.
Sal y pimienta, a gusto.
1En una olla en lo posible de hierro, derretir la manteca e incorporar la cebolla blanca junto con la morada, el puerro y el verdeo cortado al bies.
2Cocinar a fuego alto los primeros minutos y luego bajar a la menos salida de calor.
3Poner a punto de sal y pimienta, y condimentar con el tomillo, tapar la olla.
4Dejar cocinar ahí por 30/40 minutos como mínimo revolviendo cada tanto, hasta lograr una buena caramelización.
5Una vez transcurrido este tiempo, incorporar la media copa de vino blanco y dejar reducir.
6Incorporar en este momento la harina y revolver.
7Agregar el caldo a la olla y dejar hervir nuevamente hasta que reduzca.
8Servir en cuencos de barro y colocar el queso rallado en la superficie.
9Llevar a gratinar a horno fuerte.
10Acompañar con tostadas de pan de campo también gratinadas con queso gruyere.