Una lata de duraznos en almíbar.
6 huevos.
Una taza de azúcar.
Un chorrito de esencia de vainilla.
Ralladura de un limón.
340 g de nueces peladas y procesadas. (Reservar 5 o 6 enteras para decorar)
400 g de dulce de leche repostero.
1Separar la clara de las yemas.
2En un bowl, agregar el azúcar a las yemas y batir hasta unir bien.
3Agregarle la esencia de vainilla y la ralladura del limón o de otro cítrico.
4Seguir batiendo hasta lograr una consistencia bien cremosa.
5Agregar las nueces procesadas a la preparación y unir con movimientos envolventes.
6En otro bowl, batir las claras a punto nieve.
7Agregar las claras batidas a la preparación en 3 tandas, siempre con movimientos envolventes.
8Elegir un molde alto, desmontable, enmantecado y con papel manteca.
9Volcar la preparación en el molde y llevar al horno durante 45 minutos a 180°.
10Para la crema, poner la crema, fría, en un bowl, agregar el azúcar impalpable y batir. Reservar en heladera.
11Cortar los duraznos en almíbar en gajos.
12Cubrir la base con dulce de leche repostero.
13Arriba esparcir la crema dejando libre los costados y finalizar con los duraznos.
14Terminar con nueces enteras.