6 huevos.
900 g de papas (4 grandecitas).
Aceite de oliva extra virgen.
4 fetas de queso.
8 fetas de jamón cocido.
Sal, a gusto.
1Pelar y lavar las papas.
2Cortar en cubos no muy grandes y salar.
3En una sartén bien caliente con aceite, freír las papas. Uno de los secretos para hacer una buena tortilla es ponerlas a fuego medio, para que se queden blanditas por dentro y fritas por fuera.
4Cocinar unos diez minutos. Para comprobar que están correctas, al pincharlas no deben tener resistencia.
5En un bowl aparte, batir los huevos y sumar las papas ya hechas, bien escurridas del aceite.
6En este punto, separar la mezcla en 2 mitades.
7En otra sartén más chica, poner unas 5 cdas del aceite con el que freímos las papas y calentarlo.
8Sobre ese aceite, poner la mitad de la mezcla.
9Encima poner 4 fetas de jamón cocido, encima cuatro de queso y repetir con otras cuatro de jamón.
10Completar la tortilla con el resto de las papas y el huevo.
11Dejar cuajar por abajo y, cuando se despega de las paredes de la sartén, dar vuelta para que se cuaje por el otro.